El sistema de jubilaciones de las Fuerzas Armadas de Chile es gestionado por la Caja de Previsión de la Defensa Nacional (CAPREDENA) y la Dirección de Previsión de Carabineros de Chile (DIPRECA).
CAPREDENA es responsable de la entrega de pensiones de retiro y montepío a los miembros en retiro de todas las Fuerzas Armadas.
En Chile, el modelo de pensiones de reparto estuvo en vigor hasta 1980. En este esquema, las contribuciones de los trabajadores activos, junto con los aportes del Estado, se acumulaban en un fondo común que financiaba las pensiones de cada individuo.
A diferencia del sistema de cotización de las Fuerzas Armadas, el resto de los trabajadores de Chile, están obligado a contribuir a las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP).
La principal distinción entre el sistema de capitalización individual obligatoria en una AFP y el sistema anterior de reparto radica en la manera en que se financian las pensiones.
En el sistema antiguo de reparto, las contribuciones realizadas por los trabajadores activos, junto con los aportes del Estado, se destinan a un fondo común que financia las pensiones de todos los beneficiarios.
Por otro lado, en el sistema de capitalización individual obligatorio, cada afiliado cuenta con una cuenta personal donde se depositan sus aportes previsionales. Estas cotizaciones son gestionadas por las AFP, que las invierten con el objetivo de generar rentabilidad.
La rentabilidad que generan las AFPs, en su mayoría, son para repartir pensiones.
En Chile existe la PGU, que es la pensión básica universal, que no supera los $215.000 pesos, por lo tanto, por ley, ningún jubilado puede recibir menos de esa cantidad.
Volviendo al sistema de jubilación de las FF.AA según estudios, las pensiones son casi 3 veces mayores al promedio de las pensiones de los trabajadores de las AFP, además un militar puede jubilar con solo 15 años de servicio.
Entonces, ¿Tú estás de acuerdo con el sistema de pensión de las Fuerzas Armadas en Chile?
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